El sector de los videojuegos en China experimentó en 2022 su primera caída de ventas del último lustro tras bajar un 10,3 % interanual hasta los 265.900 millones de yuanes (38.879 millones de dólares, 35.253 millones de euros), informa hoy el portal de noticias económicas Caixin.
Las cifras, publicadas en un informe durante la Conferencia Anual de la Industria del Juego de China, también reflejan un caída del 0,33 % en el número de usuarios hasta los 664 millones.
El documento achaca el desempeño a la pandemia, que impidió el desarrollo de nuevos productos y se tradujo en una ralentización de la economía que afectó a la financiación de las compañías y al consumo de los usuarios.
Las compañías chinas del sector no solo experimentaron una contracción en el mercado nacional, ya que sus ventas en el exterior descendieron un 3,7 % hasta unos 17.300 millones de dólares (16.130 millones de euros), su primera caída desde 2018, en el marco de una mayor competición a nivel internacional.
El sector chino de los videojuegos se encuentra en apuros desde mediados de 2021, cuando las autoridades nacionales suspendieron nueve meses la concesión de nuevas licencias en el marco de una campaña para prevenir la adicción entre los menores.
Desde entonces, y pese a una relativa recuperación, estimaciones de Caixin apuntan a que en 2022 las autoridades solo concedieron un 33 % del número total de licencias que habían autorizado en 2020, y analistas del sector consideran «improbable» que este vuelva a recuperar sus niveles de 2017 o 2018 ante el control impuesto por los reguladores.