Un ensayo clínico internacional dirigido por la Universidad Johns Hopkins reveló que una nueva versión de la dieta DASH, diseñada específicamente para personas con diabetes tipo 2, ayuda a mejorar el control glucémico sin incrementar los episodios de hipoglucemia. El estudio, publicado en Nature Medicine, incluyó a 89 adultos mayores de 18 años con diagnóstico de la enfermedad.
El diseño del estudio
Cada participante siguió cuatro planes alimenticios distintos bajo un modelo cruzado que permitió comparar resultados en condiciones equivalentes. Entre ellos, se evaluó la dieta DASH4D —modificada para diabetes— frente a la dieta estadounidense típica, utilizada como control. Ambos planes se aplicaron en versiones con alto y bajo contenido de sodio durante ciclos de cinco semanas, manteniendo siempre el mismo aporte calórico total.
Resultados principales
Los datos mostraron que la dieta DASH4D redujo el promedio de glucosa en –11,1 mg/dl en comparación con la dieta convencional. Asimismo, los pacientes permanecieron más tiempo dentro del rango deseable de glucemia, con un aumento del 5,2% en este parámetro.
El estudio también reportó menos tiempo en hiperglucemia y mayor estabilidad de los valores al aplicar la dieta DASH4D, sin que se registraran diferencias en la incidencia de hipoglucemias.
El autor principal, Michael Fang, explicó: “La dieta DASH4D redujo de forma significativa la glucosa media y aumentó el tiempo en rango, sin aumentar riesgos”.
¿Qué propone la dieta DASH?
El plan alimentario original fue diseñado por el Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre de EE.UU. para mejorar la salud cardiovascular. Incluye entre cuatro y cinco porciones diarias de frutas y verduras, seis a ocho porciones de cereales integrales, reducción del sodio (menos de 2.300 mg al día) y la incorporación de proteínas magras y lácteos bajos en grasa.
Los especialistas concluyen que la dieta DASH4D representa una herramienta eficaz y segura para el manejo nutricional de la diabetes tipo 2, superando claramente los resultados de la dieta estadounidense típica, que no mostró mejoras significativas en los parámetros analizados.