El ayuno intermitente ha pasado de ser una práctica poco conocida a convertirse en una tendencia respaldada por la ciencia y adoptada por miles de personas en todo el mundo que buscan perder peso, mejorar su salud metabólica y llevar un estilo de vida más saludable.
En Venezuela y especialmente en ciudades como Barquisimeto, donde cada vez más personas se interesan en métodos naturales y sostenibles para cuidar su bienestar, el ayuno intermitente se ha convertido en tema de conversación habitual. Pero ¿qué es realmente esta práctica y por qué tiene tantos seguidores? Aquí te lo explicamos.
¿Qué es el Ayuno Intermitente?
El ayuno intermitente no es una dieta, sino un patrón de alimentación que alterna períodos de ayuno (sin consumir alimentos) con períodos en los que sí se permite la ingesta. Durante las horas de ayuno solo se puede consumir agua, café negro o infusiones sin azúcar ni edulcorantes.
Existen varias modalidades de ayuno intermitente, pero las más comunes son:
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12/12: 12 horas de ayuno y 12 horas de alimentación.
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14/10: 14 horas de ayuno y 10 horas de alimentación.
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16/8: 16 horas de ayuno y 8 horas de alimentación (la más popular y efectiva).
Por ejemplo, en un protocolo 16/8, una persona puede ayunar desde las 8:00 p.m. hasta las 12:00 p.m. del día siguiente, y luego alimentarse entre el mediodía y las 8:00 p.m.
Beneficios Científicamente Respaldados del Ayuno Intermitente
Varios estudios en nutrición y medicina metabólica han demostrado que el ayuno intermitente puede traer numerosos beneficios a corto y largo plazo:
Pérdida de peso eficaz y sostenible
El ayuno intermitente ayuda a reducir la ingesta calórica sin necesidad de contar calorías o eliminar grupos de alimentos. Además, al mantener los niveles de insulina bajos durante el ayuno, el cuerpo entra en un estado de mayor quema de grasa, favoreciendo la pérdida de peso corporal sin afectar significativamente la masa muscular.
Mejora la sensibilidad a la insulina y previene la diabetes tipo 2
Uno de los efectos más estudiados es la reducción de los niveles de insulina en sangre, lo cual mejora la sensibilidad del cuerpo a esta hormona, previniendo el desarrollo de enfermedades como la diabetes tipo 2.
Reducción del colesterol y mejora de la salud cardiovascular
Se ha comprobado que el ayuno intermitente puede ayudar a reducir los niveles de colesterol LDL (conocido como «colesterol malo») y triglicéridos, lo cual se traduce en una mejor salud del corazón.
Efecto antiinflamatorio y mejora de marcadores bioquímicos
Ayuda a reducir los niveles de inflamación sistémica, lo que beneficia a quienes padecen enfermedades inflamatorias crónicas como la artritis, enfermedades intestinales o fatiga crónica.
Potencial neuroprotector
Algunos estudios sugieren que el ayuno puede proteger el cerebro del envejecimiento prematuro y disminuir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer y el Parkinson.
Cómo Iniciar el Ayuno Intermitente de Forma Segura y Progresiva
No es recomendable comenzar directamente con el protocolo 16/8 si nunca has practicado ayuno. Aquí una guía práctica para iniciar:
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Empieza con un protocolo 12/12 durante al menos una semana. Por ejemplo: cena a las 8:00 p.m. y desayuna a las 8:00 a.m.
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Progresa hacia 14/10: si tu cuerpo responde bien, recorta progresivamente el tiempo de ingesta.
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Finalmente prueba 16/8, idealmente con la ayuda de un nutricionista, sobre todo si tienes condiciones médicas preexistentes.
Importante: el ayuno no es excusa para comer mal. Dentro del período de alimentación, es clave optar por alimentos saludables, integrales, ricos en fibra, proteínas magras y grasas saludables.
¿Es para todos?
El ayuno intermitente no es apto para mujeres embarazadas, personas con trastornos alimenticios, ni para menores de edad sin supervisión médica. Tampoco es recomendable si estás tomando medicamentos específicos que requieren ingesta con alimentos.
Consulta siempre a un médico o nutricionista antes de iniciar cualquier protocolo de ayuno.